«Mientras más se respete y teme a Dios, más se odiará el mal. El amor a Dios y el amor al pecado no pueden coexistir. Albergar pecados secretos significa que tolera el mal en usted. Rompa definitivamente con el pecado y comprométase por entero con Dios.»
«Una defensa verbal clara del evangelio puede ser un buen medio para animar a los creyentes y, al mismo tiempo, convencer a los incrédulos de la verdad.»
«Usted no puede ser un creyente y tener contacto con el ocultismo, la magia negra, la hechicería, el horóscopo, etc. Una vez que empiece a curiosear en estos campos, es extremadamente fácil que llegue a obsesionarse con ellas porque Satanás es muy poderoso.»