«El despertamiento no es más milagro que una cosecha de trigo. El despertamiento viene del cielo cuando almas heroicas entran en conflicto, determinadas a vencer o morir, o si es necesario, vencer y morir. »
«El individuo que se arrepiente verdaderamente no sólo ve el pecado como detestable y ruin, merecedor de aborrecimiento, sino que realmente lo aborrece, lo odia en su corazón.»